Fines perseguidos
El objetivo fue favorecer la expresión de emociones en los niños de mi grupo, mediante el uso de diferentes materiales digitales y físicos, al tiempo que se promovían los procesos de enseñanza y aprendizaje durante la contingencia sanitaria. Se consideró importante consignar esta buena práctica porque es a partir de la expresión de las emociones que conocemos nuestros sentimientos y reconocemos situaciones que nos provocan el sentirnos felices, relajadas, emocionadas, tristes y/o enojadas, y, de esta manera, organizamos mejor el pensamiento y abrimos canales al desarrollo de enseñanza-aprendizaje de una mejor manera.
Puntos clave de la práctica
Se explicó que los sentimientos pueden ser variados, podemos sentirlos todos: estar contentos, relajados, emocionados, pero también nos podemos sentirnos enojados, enfadados, con ganas de llorar y es normal sentirnos de alguna manera. Se resaltó la importancia de saber identificar qué nos está generando algunos de estos sentimientos y qué podemos hacer para sentirnos mejor.
Para el logro del objetivo de la práctica se realizó el diseño de diversos materiales educativos, tanto digitales e interactivos, como impresos, usando imágenes atractivas en donde la expresión facial denote las diversas emociones humanas de una forma comprensible para las y los alumnos. A quienes no pudieron acceder a la clase virtual se les envió la planeación con las fichas de trabajo y las instrucciones para la elaboración del material educativo para ser trabajado en casa con el apoyo de las familias.
A las niñas y niños se les pidió que clasificaran sus emociones de distintas maneras: dibujándolas y representándolas con un color; mediante el uso de ruletas, pizarras y/o dados digitales con las diversas emociones al finalizar las clases, los cuales fueron diseñados por la docente; entre otras. A través de esas herramientas, las y los alumnos dieron respuesta a las siguientes cuestiones: “cómo me sentí hoy en clases”, “por qué me sentí así”, “qué me gustó y qué no”, “qué me hizo feliz”, y “qué me aburrió”.
Se buscó permitir la libre expresión de emociones, sobre todo al iniciar la clase, y se trabajó alentando la participación de aquellas niñas y niños que normalmente se les dificulta el intercambiar opiniones en clase. Se le hace la pregunta a cada estudiante de manera directa, se le da el tiempo para que piense y se sienta en confianza de expresarse, aunque también se respeta cuando no quiere hablar de sus sentimientos.
Al ser niños y niñas pequeñas, en ocasiones, se les ha dificultado más expresar lo que les hace sentir tristes, enojadas, o con ganas de llorar, mientras que se observa más facilidad en la expresión de la felicidad.
Principales cambios observados
Las y los estudiantes se familiarizaron, cada vez más, con los materiales educativos que se les presentaron. Concretamente, se percibió a las y los alumnos más animados a identificar y hablar, tanto de sus sentimientos, como de las situaciones que los provocan. Además, las niñas y niños ahora expresan cariño mediante el lenguaje verbal y facial al despedirse de sus compañeros con una sonrisa y una expresión de afecto.
En suma, puede decirse que la interacción con los diferentes materiales visuales y el lenguaje amoroso, ha surtido efecto en el grupo creando un ambiente de confianza, solidaridad, colaboración y participación que facilita la modalidad de las clases a distancia.
Entre colegas: recomendaciones para hacer uso de la estrategia o de sus componentes
- Para las mamás, papás o familias: apoyar en casa y durante las clases en línea, explicando, elaborando material, realizando preguntas a sus hijos sobre sus emociones, expresándole a sus hijos sus sentimientos.
- Para las niñas y niños: escuchar, observar, expresar, hacer preguntas, colaborar en el diseño de su material y darle el uso adecuado, y expresar sus emociones.
- Para nosotras las maestras: ser constantes en el trabajo con la expresión de sentimientos, mostrar empatía hacia la expresión de las emociones de las y los alumnos, expresar de manera clara y concreta las propias emociones, incorporar la práctica como parte de la dinámica de grupo. También es muy importante expresar a los alumnos nuestros sentimientos hacia ellos, decirles “los quiero mucho, les envío un abrazo y un beso”, “cuídense mucho, no olviden que aquí los estaré esperando en la próxima clase”; he observado que, a partir de ello, poco a poco las niñas y niños se han ido apropiando de estas expresiones y encontrado el significado e impacto que causan en las demás personas.
- Entre los materiales que se pueden utilizar se encuentran: ruletas digitales de las emociones, dado de los sentimientos, cuento el monstruo de los colores, manoplas, marionetas, pizarras de las emociones, tarjetas de preguntas, fotografías, planeación de actividades, videos con entrevista a las niñas y niños “como me siento hoy…”, e instrumentos de evaluación (bitácora, guías de observación, etcétera).
