Fines perseguidos
El objetivo general fue promover el conocimiento y uso cotidiano del concepto de números negativos con las y los alumnos de primero de secundaria. Como objetivos específicos se plantearon: i) Dar a conocer el significado y características de los números negativos mediante el juego como estrategia didáctica; ii) Estimular la expresión oral a través de la presentación de resultados de las y los alumnos al grupo, así como a sus familiares para practicar la actividad en casa; y, iii) Promover el trabajo colaborativo entre las y los alumnos.
Puntos clave de la práctica
Esta experiencia puede considerarse una buena práctica porque se lograron alcanzar los aprendizajes esperados, mediante un trabajo lúdico basado en actividades simples que las y los alumnos pueden realizar dentro y fuera del aula. Los principios pedagógicos que guiaron el proyecto fueron poner al alumno y su aprendizaje en el centro del proceso educativo, identificar sus saberes o conocimientos previos, ofrecer acompañamiento, así como reconocer el valor del aprendizaje informal.
Una de las actividades más representativas fue la formulación de problemas significativos para el alumnado; ello implica que los problemas planteados representen un reto que las y los alumnos puedan hacer suyo, lo cual está relacionado con su edad y nivel escolar. En general las actividades realizadas son fáciles de replicar, por lo que no requieren grandes cantidades de material u objetos difíciles de conseguir, y, además, contribuyen a que las y los alumnos puedan reproducirlas con sus familiares en casa, así como con amistades o compañeros.
Principales cambios observados
Gracias a las actividades realizadas se observó un cambio de paradigma hacia las matemáticas, en particular, con los números negativos porque las y los alumnos, de manera paulatina, empezaron a adquirir la habilidad de sumar números positivos y negativos. Aunado a ello, las y los estudiantes mostraron mayor disponibilidad para aprender, se promovió el trabajo colaborativo en equipos o parejas y su vínculo con el docente mejoró gracias al acompañamiento y apoyo sistemático que éste les brindó. Por último, destaca la confianza que ganó el alumnado con el docente y los lazos creados entre sí, ya que, al ser estudiantes de primer ingreso, prácticamente no se conocían.
Entre colegas: recomendaciones para hacer uso de la estrategia o de sus componentes
- Generar un ambiente de confianza con las y los alumnos, principalmente de primer grado, para motivarles a participar y comentar dudas. Si se impone la figura de un docente autoritario será un poco más difícil generar un ambiente propicio para el aprendizaje.