Blog del Faro

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Carrera hacia la meta: reforzamiento de números con signo, a través del juego

En este documento, la Mtra. Karen Rubí Rodríguez Calderón, docente de una escuela secundaria en Nayarit, nos comparte cómo fomentar en las alumnas y alumnos actitudes positivas hacia las matemáticas, mediante situaciones que despierten interés con juegos y actividades lúdicas para la apropiación de los contenidos de números con signo. Se trata de una buena práctica en la categoría “Uso de materiales educativos”, como parte del ejercicio de sistematización de buenas prácticas de docentes, encabezado por Grupo Loga, el Faro Educativo de la IBERO, Proeducación, Pauta y Renaced, y cobijado también por la Red de Mujeres Unidas por la Educación.

Comienza la conversación

Karen Rubí Rodríguez Calderón
Docente de secundaria
Nayarit

Ubiquemos la buena práctica

Categoría: Uso de materiales educativos
Nivel y modalidad educativa: Secundaria técnica
Grado escolar: Segundo grado
Turno: Matutino y vespertino

Fines perseguidos

El objetivo general de la buena práctica es fomentar en las alumnas y alumnos actitudes positivas hacia las matemáticas, mediante situaciones que despierten interés con juegos y actividades lúdicas para la apropiación de los contenidos de números con signo, haciendo partícipes a sus padres para fortalecer el aspecto socioemocional en la familia. Como objetivos específicos se plantearon: i) Concientizar sobre la importancia de las matemáticas en situaciones de la vida diaria en la aplicación de números con signo; ii) Involucrar a los estudiantes para que tomen parte activa en la construcción de sus conocimientos para que el aprendizaje sea significativo en los números con signo; y, iii) Incluir a los padres de familia en la buena práctica interactuando con sus hijos para favorecer el desarrollo emocional familiar.

Puntos clave de la práctica

Desde la antigüedad las Matemáticas han sido estudiadas por grandes filósofos y científicos como Pitágoras, Platón, Euclides, Descartes, Pascal, Newton y otros. Las matemáticas se han considerado como la llave de oro que abre todas las ciencias y, por tanto, se considera que quien no conoce las matemáticas, no conoce la verdad científica. Para Carl Friedrich Gauss la matemática es la reina de las ciencias. Aunque la mayoría de los estudiantes perciben a las matemáticas como muy importantes, también las encuentran difíciles, pues sienten que los obligan a pensar y a trabajar mucho. Por ello, algunos alumnos al momento de escuchar que recibirán dicha asignatura suelen bloquear su mente y desde antes de iniciar el curso se hacen a la idea que será difícil.

Durante mi ejercicio profesional como docente de matemáticas, he tratado de implementar estrategias que promuevan la participación y sobre todo la motivación de los alumnos para la apropiación de los contenidos matemáticos. Cuando las clases se impartían de manera presencial, se repasaban los temas en forma activa y recreativa; jugando en el pintarrón, inventando problemas de la vida cotidiana o a manera de cuentos, y elaboraba y diseñaba juegos de acuerdo al tema propuesto para salir a la cancha abordando las actividades de manera lúdica y amena. Con la llegada de la pandemia de covid-19 a todas las actividades de la comunidad, incluyendo las de nuestro sistema educativo, se vieron afectadas de manera importante, ya que se presenta una situación inesperada e inédita para la cual no estábamos preparados. Al inicio se pensó que nos dejaríamos de ver solo un mes, pero jamás imaginamos que no regresaríamos a las aulas en tanto tiempo. En lo particular, fue algo que me preocupó ya que me preguntaba: ¿cómo voy a seguir manteniendo el interés y la motivación de mis alumnos a distancia?

Considerando que en el contexto escolar donde me desempeño hay alumnos que no cuentan con internet en casa o con una computadora, tenía que hacer algo más que clases en línea, por lo que opté por realizar mi propio cuadernillo por tema, en el cual se explica de manera sencilla, con ejemplos, cada uno de los temas que vamos a revisar, se añaden colores, dibujos para hacerlo más atractivo, y al finalizar coloco una frase que impulse a mis estudiantes a seguir adelante. Para seguir propiciando la motivación e interés de mis alumnos y alumnas realicé el juego “jeopardy matemático” para aquellos con conectividad y computadora. También trabajé con mis estudiantes que no tenían acceso a una computadora o internet, a partir de enviarles actividades en donde tienen que realizar el juego propuesto dependiendo del tema que estemos reforzando, posteriormente tienen que jugarlo con algún miembro de su familia. Siempre trato de involucrar a los padres e influir un poco en que tengan un momento de convivencia.

La actividad más exitosa de la práctica -compuesta por diferentes juegos-  considero que es la interacción, motivación y disposición que mostraron los alumnos con sus padres. A pesar de esta situación extrema, ocasionada por la pandemia y el trabajo a distancia, se observa que el aprendizaje de las matemáticas se puede desarrollar en diferentes tipos de escenarios, desde regulares hasta inéditos, por lo que es necesario utilizar la creatividad y apelar a la vocación y sentido de solidaridad con los alumnos.

La práctica específica denominada “Carrera hacia la meta” buscaba responder al reto de que los alumnos se apropien de los conceptos y operaciones de los números con signo, ya que estos contenidos son el inicio para el estudio del álgebra que en los grados y niveles sucesivos continuarán aprendiendo. “Carrera hacia la meta” tuvo una duración de cinco días. Con todo, en lo que va del ciclo escolar se han implementado prácticas similares, que van acorde al tema visto en un momento particular. Con lo que respecta a los contenidos de números con signo se buscó la participación de los alumnos con sus padres para que, a la vez, estos se involucren en el proceso educativo de sus hijos. Según estudios, si se establece una conexión entre padres e hijos, se crea una base más sólida para el éxito de los alumnos.

La práctica se hizo de la siguiente forma. Como todos los lunes, se les envió por medio de WhatsApp a los padres de familia la actividad de la semana. Esta vez se les pedía realizar el tablero que ahí se indicaba con una imagen en el cual vienen números positivos y negativos. Se requerían dos dados de diferente color para que uno represente los números positivos y el otro los números negativos.

El juego consiste en lo siguiente: Al iniciar la partida la ficha de todos los jugadores se coloca en la casilla roja 0. Los jugadores tiran alternativamente los dos dados y hacen con su ficha los dos movimientos indicados por estos. Por ejemplo, si un jugador ha obtenido un 5 con el dado rojo (es decir +5) y un 6 con el dado azul, (que corresponde al valor -6), avanza primero 5 en el sentido positivo y después 6 hacia atrás en el sentido negativo o simplemente realiza la operación +5 -6 = -1. Al final de la jugada su ficha se encontrará en la casilla -1. A continuación, el jugador relleno en su libreta una tabla con los movimientos efectuados. Gana quien llegue primero a la meta. A todos los estudiantes se les solicitó enviar una pequeña grabación en donde se les observara realizando la actividad.

El martes, ya que los alumnos revisaron su tarea, se explicaron dudas para algunos en la clase en línea, para otros por medio de WhatsApp mediante audios o mensajes. Los días siguientes continuamos comunicándonos para saber cómo iban con su actividad. Cada que me ponía en contacto con ellos hacía énfasis en que tenían que realizar la actividad con alguien de su familia, de preferencia mamá o papá. Esto para propiciar la convivencia, participación, crear un ambiente de confianza y familiar entre mis alumnos y sus padres, así como tratar que, por un momento se olvidaran de la situación que estamos viviendo.

En el transcurso de los días varios alumnos me decían que no podían terminar el juego ya que al salirles números negativos tenían que estar retrocediendo, esto, en vez de causarles molestia les provocó risa. Otros sí tuvieron más suerte y llegaron a la meta. El viernes tuvimos clase de nuevo y platicamos de cómo se sintieron jugando con las matemáticas desde su hogar y compartiendo sus aprendizajes con su familia. Finalizamos de manera satisfactoria y mis alumnos quedaron en espera de nuevos juegos.

Principales cambios observados

A partir de la práctica -con los distintos juegos- observé una mayor participación y motivación para abordar los contenidos, así como buena disposición en el trabajo y la interacción de mis estudiantes con sus papás en el desarrollo de las actividades propuestas.

En esta práctica el docente actúa como coordinador, motivador y guía, es decir, el profesor o profesora cede su protagonismo para que el estudiante sea quien asuma el papel fundamental en su propio proceso de formación, convirtiéndose en el centro del aprendizaje.

Entre colegas: recomendaciones para hacer uso de la estrategia o de sus componentes

Para replicar este tipo de juegos les sugiero a los docentes planear con antelación todas las actividades y tener claro el objetivo a lograr, tomando en cuenta el contexto y necesidades de cada alumno. Además de estar dispuestos y con toda la voluntad para afrontar situaciones inéditas, por más difíciles que estas parezcan.