Durante el proceso de canalización de alumnos para el servicio de educación especial, los docentes de aula regular, después de aplicar la evaluación diagnóstica y observar la dinámica de interacción de los estudiantes, remiten al área de la Unidad de Servicios de Apoyo a las Escuelas Regular (USAER), el documento llamado pesquisaje grueso; donde describen problemas observados en el grupo, y emiten una lista con los nombres de los alumnos que requieren apoyo alterno de educación especial. A partir de ese momento el área de aprendizaje tiene la oportunidad de realizar en el aula regular un acercamiento para observar, evaluar e identificar las necesidades de los alumnos canalizados por el docente de aula y generar un plan de intervención.
En esta buena práctica se abordó el caso de un alumno con discapacidad intelectual leve. Este alumno fue remitido a la USAER por el docente de grupo; debido a que, en la observación diaria del proceso de socialización y aprendizaje, el estudiante presentaba conductas diferentes al resto de sus pares. Esto llamó la atención del docente quien solicitó el apoyo para el niño en su proceso de aprendizaje. Por lo que el servicio de USAER intervino dando asesoría al docente y acompañamiento al alumno.
En la fase 2 y 3 de la evaluación e intervención pedagógica se realizó la observación al alumno dentro del aula, así como la evaluación pedagógica en lo que se detectó; aislamiento del alumno durante las actividades, apatía, desinterés y escasa motivación por aprender, bajo aprovechamiento escolar, nivel de conceptualización de la lectoescritura en presilabico sin control de cantidad, debido a ello, asistir a la escuela no era agradable ni motivante.
Cabe destacar que los retos de esta práctica educativa con el alumno con discapacidad intelectual leve, fueron: Dificultades en los procesos de atención, memoria y percepción para entender y realizar actividades dentro y fuera del aula de clases; aunado a ello, el alumno perdía el material básico de trabajo (colores, lápiz, cuaderno, tijeras, resistol, entre otros materiales que se solicitan para trabajar en el aula). Además, recibía poca atención y apoyo en casa para la realización de las tareas escolares, todo lo anterior se realizó aplicando las fichas de pehis para evaluar las habilidades sociales, la observación y evaluación prediseñada donde se incluyeron aspectos como: dinámica de aprendizaje del alumno con relación a la metodología implementada en el proceso de enseñanza aprendizaje del docente, nivel de conceptualización de la lecto-escritura, habilidades matemáticas, tiempo de atención, ritmo y estilo de aprendizaje así como también intereses del alumno en su etapa de desarrollo.
Por lo anterior y para llevar a cabo esta buena práctica y en la fase 4 de implementación del plan de intervención se plantearon distintos objetivos, mismos que se presentan a continuación:
Objetivo general:
Fortalecer en el alumno con discapacidad intelectual leve los procesos cognitivos de atención, memoria y percepción en el proceso de aprendizaje mediante el uso de juegos tradicionales.
Objetivos específicos:
1. Estimular los procesos cognitivos para el aprendizaje en el alumno con discapacidad intelectual leve con apoyo de juegos tradicionales.
2. Aumentar la motivación y el interés del alumno por aprender.
La idea de incluir el juego dentro de la práctica educativa surgió a partir del análisis del problema que se presentó al momento de observar al alumno con discapacidad intelectual leve en su quehacer diario. Donde la mayor parte del tiempo se observó distraído, sin embargo, lograba realizar actividades lúdicas, por lo que retomando las etapas de desarrollo de la teoría de Jean Piaget, que hace referencia al juego en la etapa de desarrollo de las operaciones concretas entre las edades de 6 a 12 años. De acuerdo a Piaget, el juego es importante y esencial para el desarrollo y el aprendizaje del niño, por ello la práctica educativa que se realizó con el alumno con discapacidad intelectual leve se estableció a partir del juego fortaleciendo y estimulando su proceso cognitivo de la atención, memoria y percepción. Es por ello que las actividades realizadas se focalizaron en aumentar el tiempo de atención y fortalecer la memoria a corto plazo.
Actividades implementadas. Fase 4 de la intervención didáctica
- Memoria vocálica y actividad visual
En la primera actividad para entablar confianza con el alumno se realizó el juego de memoria vocálica, en este juego las tarjetas incluían las 5 vocales tanto en mayúscula (color rojo) y las minúsculas (color negro), los dibujos distribuidos en nombres de personas (con letra Inicial mayúsculas) y los nombres de cosas o animales (minúsculas). La indicación que se le dio al alumno fue “observa las tarjetas que están enfrente de tí, debes tomar una y observar qué imagen se presenta, posteriormente debes identificar la vocal con la que inicia dicha imagen, para que después busques entre las demás tarjetas la vocal que corresponde al dibujo”. El juego se realizó de 2 a 3 partidas, en la 1ra sesión. A partir de la 2da sesión el niño fue mostrando mayor comprensión en la actividad logrando consolidar las 5 vocales en mayúsculas con nombres propios y minúsculas con nombres comunes en 2 semanas, durante 6 sesiones de 15 minutos.
- Lotería vocálica (actividad visual-auditiva)
Para reforzar el juego anterior la siguiente actividad realizada fue la lotería vocálica, utilizando cartillas con 9 imágenes tomadas del juego de memoria vocálica, está actividad promovió en el alumno la ubicación de las vocales en mayúsculas y minúsculas en el tablero, identificó nombre propio y nombre común además, las indicaciones fueron: toma un tablero y coloca una ficha en la imagen que inicie de acuerdo a la la vocal que te dicté, al cantar la carta se menciona ejemplo: E mayúscula en rojo y el nombre del personaje Elsa, el alumno coloca su ficha y se verifica con la carta si la marcó correctamente, esta actividad se realizó por 2 semanas en 6 sesiones trabajando 15 minutos por sesión.
- Caliente y frío vocálico (actividad visual, auditiva y kinestésica)
Otro juego aplicado “caliente y frío”, se trabajó con las imágenes utilizadas en la memoria y lotería vocálica, sólo que en este caso se eligieron 5 tarjetas con vocales en mayúsculas y 5 tarjetas en minúsculas en tamaño grande para que fuesen visibles a la vista del niño. Indicaciones: se esconden las imágenes dentro del aula entre el decorado y se le explicó al alumno que escogiera una tarjeta de las que estaban en la mesa y en voz alta pronunciara qué vocal era, seguidamente se le pidió que buscará alrededor del salón, la tarjeta que tenía esa vocal si era vocal roja sabía que la tarjeta era un nombre propio, si era la vocal color negra busco un animal o cosa en la tarjeta, la única ayuda que se le dio fue decirle que si estaba cerca se le pronuncio la palabra caliente y si estaba lejos la palabra frío, al encontrar la imagen compara la tarjeta encontrada con la tarjeta que tomó al principio si es correcta la dibuja en su cuaderno y clasifica en mayúsculas (nombres propios y minúsculas nombres de animales o cosas). Este juego se trabajó durante 6 sesiones cambiando las imágenes por otras que se encuentran dentro de la memoria vocálica.
- Cantemos con las vocales (actividad auditiva)
Para este juego se buscó la canción Ronda de vocales de Mundo Canticuentos (Ronda De Las Vocales, Canticuentos, Canción Infantil – mundocanticuentos, 2015) sentado de frente al docente el alumno escucha la canción de la ronda de las vocales una vez, el docente cuestionó que había entendido, nuevamente se escucha la ronda y se volvió a preguntar al alumno sobre lo que escucho, en la tercera ocasión el alumno tarareo la canción conforme la escuchaba, se vuelve a cuestionar, pero en esta ocasión realizo la forma de las vocales con limpia pipas en el orden que escuchaba que las nombraba la ronda. La actividad se realizó por 2 semanas en 6 sesiones y el tiempo de aplicación fue de 15 minutos.
- Juguemos a escribir
Este juego fue de evaluación por lo que es más formal, se le presentó al alumno diversas tarjetas con la imagen de una persona, animal o cosa que se estuvo trabajando durante la clase, la consigna fue escribe en tu cuaderno el nombre de la imagen que observes recuerda que si es nombre propio lleva color rojo y si es un nombre de animal o cosa es de color negro, se le mostró la imagen y la escribió. Para finalizar se le mostró la tarjeta con el nombre y el mismo niño corrigió lo que le faltó en su escritura. Posteriormente se le proporcionó una hoja con imágenes y consonantes y se le indicó que escribiera las vocales que le correspondía a cada imagen para completar el nombre. Esta actividad se aplicó en 6 sesiones con duración de 15 minutos.
Cabe mencionar que estos juegos después de aplicarlos con el alumno con discapacidad durante dos semanas, también se realizaron en el aula regular, para trabajar con todos los alumnos de su grupo de 2do grado, propiciando que el alumno con discapacidad intelectual leve se sintiera en un ambiente armónico y de confianza con los demás compañeros. Posteriormente, se realizaron más actividades que se enfocaron a la consolidación de las consonantes m, s, p y t, así como la escritura de enunciados con otros juegos.
En este caso en particular las actividades realizadas con el alumno con discapacidad intelectual leve se realizaron en un primer momento en el aula de recurso y en un segundo momento dentro del aula regular favoreciendo la integración e inclusión del niño en su ambiente escolar y sus necesidades individuales de aprendizaje, pues en un inicio el mismo niño con discapacidad intelectual leve se excluía de las actividades del grupo debido a su inseguridad y baja autoestima, sin embargo partir de la aplicación de los juegos dentro del aula regular el alumno pudo realizar las actividades apoyándose de sus iguales, por lo que el niño se motivaba a participar al ser apoyado e incluido en su grupo durante los juegos y actividades que se planteaban.
La buena práctica consistió en utilizar el juego como estimulación de los procesos de atención, memoria y percepción como herramienta básica; despertando el interés, la participación e integración del alumno con discapacidad intelectual leve hacia el logro de contenidos de aprendizaje tales como conocimiento e identificación de vocales, nombres propios y comunes, uso de mayúsculas y minúsculas por lo que el juego es, lo que llevó a promover en el niño el aprendizaje de ciertos contenidos de la lengua materna.
En la fase 5 de evaluación y seguimiento de la intervención didáctica se observó; Cambios en el alumno, reflejados en su conducta, aumentando su participación, integración y socialización dentro del aula regular, por lo que fue considerado parte del grupo y pudo relacionarse en mayor medida con sus compañeros. También, en el área de aprendizaje logró un avance significativo con relación a su aptitud y actitud, en tanto que la asistencia a clases aumentó. Además, realizaba en su cuaderno el copiado del pizarrón, mostraba entusiasmo y ánimo en lo que realizaba. Para el mes de diciembre de 2023 ya había consolidado las consonantes m, s, p y t, y escribía palabras y enunciados con sujeto, verbo y predicado. Sus evaluaciones fueron realizadas en conjunto con el docente de aula regular con base en lo que se planeaba durante el trimestre. Las actividades se evaluaron a través de rúbricas, establecidas entre el docente de educación especial y el de aula regular.
Lengua materna y lecto-escritura fueron las asignaturas y contenidos utilizados en esta buena práctica ya que los resultados de las necesidades educativas del alumno se enfocaron a estimular la percepción, memoria y atención para facilitar su proceso de adquisición de la lectoescritura.
El papel del docente de USAER, se centró en mantener el interés del alumno al poner en marcha los juegos planteados, en cada sesión, así como al dar ciertos tips o pistas al alumno para que no decayera su ánimo al realizar cada actividad. Después de la segunda práctica, el docente fue clave y reforzó el área emocional con frases como “tú puedes”, “sí sabes”, “esfuérzate más” y “lo estás haciendo bien”. Al acompañar al niño en el proceso que lleva en cada actividad, tanto el docente de USAER como el docente de grupo pudieron comprender y conocer cuáles eran las fortalezas, debilidades, así como áreas de oportunidad del alumno; para poder establecer proyectos específicos que dieron respuesta a las necesidades de aprendizaje establecidas para el alumno.
En lo que respecta al papel del alumno su participación fue constante en su proceso de aprendizaje, el realizar los juegos a su ritmo y estilo de aprendizajes, abonó a aumentar su tiempo de atención y mejoró su participación, constancia y perseverancia en las actividades del aula.
Esta implementación parte de los recursos humanos como es el docente de aula regular, quien fue que detectó el problema, el maestro de USAER quien realiza el seguimiento e implementación del plan de intervención, hasta los recursos materiales que se elaboraron y utilizaron en la puesta en marcha de esta buena práctica, a continuación, se describen:
1. Aplicación del pesquizaje grueso.
2. Aplicación de evaluación diagnóstica y observación.
3. Uso de distintas herramientas de detección inicial para FODA
4. Realización del plan de intervención en conjunto con el docente de aula regular y elaboración de un objetivo a alcanzar en cierto periodo de tiempo.
5. Las actividades tenían diversos materiales: la lotería, memoria, cartillas y tarjetas más largas se realizaron en tabloides gruesos, que posteriormente se recortaron, así también se utilizó formas de MDF que es material de reciclaje para marcar las tarjetas en la lotería. los personajes fueron tomados de películas populares, limpia pipas para armar las vocales, bocina y canto “Ronda de las vocales” seleccionado y bajado en un USB, cuadernos del niño, lápiz, borrador, colores, resistol, un lugar amplio como es la cancha techada de la escuela, aula de recursos y aula regular.
6. Por último, se realizó la puesta en marcha del plan de intervención en los tiempos previstos, apoyándose de los recursos materiales ya elaborados con anticipación. Cabe hacer mención que este proyecto se realizó en dos momentos: En un primer momento; se realizaron las actividades con el alumno con discapacidad intelectual leve en el aula de recursos y en un segundo momento; se implementó en el aula regular.
De todas las actividades la “Lotería vocálica” se considera la más llamativa, novedosa y desafiante, pues los personajes eran nuevos y las tarjetas muy coloridas, lo que llamó la atención de los alumnos. Además, fue la segunda actividad que se le presentó al alumno y en la cual realizó un esfuerzo mayor para ubicar los personajes y las vocales pues tenía que observar la carta que salía y buscarla en su cartilla, esta actividad resultó un reto tanto para el alumno con discapacidad intelectual como para los compañeros de grupo por el manejo de nuevas imágenes que no tienen nada que ver con la lotería tradicional.
En esta práctica se sugiere a los docentes que al implementarla utilicen recursos que estén al alcance dentro del entorno del alumno, observando que los materiales pueden ser de reciclaje, manipulables, con recortes de revistas, periódicos o en su caso elaborarlos con el mismo alumno como un proyecto de seguir instructivos, claro que este último llevaría mayor tiempo pero pudiera resultar con mayor eficacia al momento de aplicarlo, de igual manera se presentan otras estrategias para complementar esta buena práctica como son:
1. Utilizar contenidos con mayor relevancia tales como nombres de animales, cosas, personas o personajes que influyen en el contexto o que el alumno conoce o quiera conocer.
2. Promover la comunicación asertiva y constante con el docente de aula regular, esto ayudará a detectar cambios de conducta en los alumnos que puedan darse a consecuencia de posibles problemas dentro del aula escolar, por ser los alumnos con discapacidad intelectual leve son niños vulnerables a situaciones de bullying, exclusión, ausentismo entre otros.
3. Se sugiere trabajar actividades previas en el aula de recursos con el alumno con discapacidad intelectual leve con el objetivo de fortalecerlo emocionalmente antes de trabajar con el resto del grupo, para brindarle las mismas oportunidades de participación y desenvolvimiento que el resto del grupo.
4. Los materiales utilizados en estas actividades fueron apegadas a intereses y temas antes vistos con el niño y se utilizaron en todos los juegos las mismas imágenes y letras para ser más funcional la secuencia de actividades, pero será decisión de quien aplique estas actividades utilizar las mismas temáticas o buscar nuevos campos semánticos siguiendo las necesidades de los alumnos y sus contextos.
5. Por último, al docente se le recomienda mantener en todo momento, paciencia, constancia y perseverancia en cada juego, no perder el objetivo que se ha planteado y estar atento a la interacción del niño con las actividades, si observa que el planteamiento del juego es muy fácil o muy complicado para el alumno deberá adecuarlo para lograr el interés del niño en cada juego.
En conclusión se rescata de esta buena práctica, la importancia de conocer a los alumnos en su entorno, sus necesidades e intereses, su etapa de desarrollo para poder diseñar estrategias de trabajo que permitan en el alumno la construcción de un aprendizaje significativo y funcional que dé respuesta a sus necesidades de aprendizaje, estimulando los procesos de atención , memoria y percepción a través de la interacción de los diversos juegos tradicionales adaptados a la enseñanza de la lectoescritura en alumnos con discapacidad intelectual leve.
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Referencias:
- Anwandter Marlore, (2014, 30 de junio). Ronda De Las Vocales, Canticuentos, canción infantil. [Vídeo]. Recuperado de https://youtu.be/CqTXFbnG0ag
- Biblioteca práctica para padres y educadores. (1998). Pedagogia y psicología infantil. El periodo escolar, tomo III. (Edición 1998). Madrid España, Editorial Cultural S.A.
